Si un poeta va a la guerra
pierde su cielo, su soberanía,
la inocencia muere, su canto se marchita.
Si un poeta va a la guerra
se tira de bruces contra las balas,
ahuyenta a los perros con el culo
recibe la metralla con risa de asno,
se abraza al enemigo muerto
y besa al moribundo en los dos bandos.
Si un poeta va a la guerra
en las trincheras, sopla aire fresco a cabo y capitán
limpia las letrinas, alimenta pájaros heridos
guarda el riachuelo y desvía a las tropas
recolecta los huesos y construye un órgano de iglesia.
Si un poeta va a la guerra
canta desnudo entre la sangre y el humo
la horrible, la absurda balada del idiota,
se despoja del fusil, del cuchillo y las granadas,
canta la artillería mortal de mil palabras inútiles
la asquerosa, testaruda, inservible, manía de matar.
Si un poeta va a la guerra
se despide de su amor, para no volver.
Oscar Vazquez.