La poesía es una de mis grandes debilidades, acariciar el silencio con palabras es un arte.
A lo largo de mi trayectoria he tenido la oportunidad de acompañar la poesía de queridos y admirados amigos poetas, como Oscar Vázquez, Eduard Carmona o Julio Higueras.
Han sido varios recitales, muchos de ellos multidisciplinarios, en los que juntábamos música, poesía, pintura, danza y otras formas de arte experimentales.
Aquí muestro algo de lo que he podido rescatar de esos bellos encuentros: